El Banco Santander ha sido condenado por primera vez en
la provincia de Las Palmas por la comercialización en el año 2007 de
los bonos convertibles (conocidos como Valores Santander), unos
productos complejos que provocaron que miles de clientes en toda España
perdieran en torno al 55% del dinero que invirtieron en ellos.
El Juzgado de Primera Instancia número 10 de la capital grancanaria ha
dictado una sentencia que da la razón a la demandante, anula el contrato
y obliga a la entidad financiera a devolverle 170.000 euros, aunque a
esa cantidad habrá que restarle los rendimientos e ingresos que percibió
desde su suscripción y sumarle los respectivos intereses legales.
La resolución judicial, fechada el 24 de mayo, hace
hincapié en que a la afectada, una auxiliar administrativa sin
conocimientos financieros y de perfil minorista, no se le proporcionó
una conveniente información previa a la contratación del producto. En
contra de lo manifestado por la entidad, la clienta negó haber recibido
el folleto con el resumen de las características esenciales de los
Valores Santander a la hora de suscribir la orden de compra o antes.
El magistrado va más allá y sentencia que la entidad financiera habría
incumplido su deber de información aunque hubiera entregado el documento
a la clienta en ese momento. Y es que el folleto estaba redactado "en
un léxico incomprensible para alguien ajeno a los mercados de valores",
no incluía gráficos ni dibujos explicativos y no advertía de que era un
producto de riesgo ni de que se trataba de la adquisición de bonos
convertibles en acciones del banco y, por lo tanto, sujeto a las
fluctuaciones de la Bolsa.
La resolución judicial
declara la nulidad del contrato por vicio del consentimiento por error,
al incumplir la normativa protectora de los usuarios de banca en lo
relativo a la información.