LUIS ÁNGEL SANZ
(El Mundo)
El partido en Tenerife está hecho unos zorros; nadie se
ha ocupado de hacer limpieza, así que vamos a crear una gestora para
empezar a trabajar de otra manera». Así de duros son en la dirección
federal del PSOE al valorar lo que está ocurriendo en la isla, donde Ferraz está forzando dimisiones. El secretario general del PSOE tinerfeño, Manuel Fumero,
fue el último en ser empujado a dimitir, el 9 de abril. Fumero era,
además, el número cuatro de la lista socialista por Tenerife al Parlamento de Canarias.
Ahora, Ferraz está negociando con las distintas sensibilidades de los
socialistas de la isla y de Canarias la composición de una gestora que
dirigirá la formación hasta que se celebre un congreso insular.
El primero fue el alcalde de Icod de los Vinos, que pretendía repetir como candidato a pesar de tener juicio oral abierto.
Tras él han ido apareciendo otros imputados en distintos casos,
relacionados con el urbanismo, que Ferraz ha intentado que queden fuera
de las listas electorales, aunque no lo ha conseguido del todo.
Estas investigaciones judiciales afectan al menos a una decena de
altos cargos locales, algunos muy importantes como el citado Manuel
Fumero o el todavía candidato al Cabildo de Tenerife y ex senador Aurelio Abreu. Algunos tienen juicio oral ya abierto, así que, aplicando el Código Ético aprobado por el PSOE, están obligados a dimitir.
De hecho, el lunes la dirección federal se encontró con que entre los
candidatos presentados todavía había uno con juicio fijado por
prevaricación urbanística, Manuel Correa, candidato a alcalde de La Victoria.
El PSOE ha exigido entre el martes y el miércoles a Correa que dimita
para que corra la lista. Él se resiste, como aseguran fuentes de su
entorno. Si no se va, el secretario de Organización, César Luena, está dispuesto a retirar la candidatura del PSOE en este municipio, a pesar de que tiene opciones de gobernar.
Un caso grave por su importancia es el de Aurelio Abreu,
candidato del PSOE al Cabildo de Tenerife (equivalente a la Diputación)
y miembro de la Ejecutiva de Canarias. Abreu no tiene juicio oral
abierto, pero está siendo investigado por los presuntos delitos de
prevaricación y malversación de fondos públicos por unos hechos
denunciados cuando fue alcalde de Buenavista. Entonces
adjudicó a dedo y abonó la redacción de un proyecto por 160.000 euros.
Hasta ahora se ha negado a dimitir porque dice que está imputado por «un
tema estrictamente administrativo».
Otra integrante de la Ejecutiva regional está imputada por malversación y es candidata a alcaldesa de San Juan, Fidela Velázquez.
Fuentes de Ferraz empiezan a desconfiar del partido en Canarias, que dirige el consejero y miembro de la dirección nacional José Miguel Pérez, por el grado «de descomposición» al que ha llegado Tenerife.