Los estibadores del puerto de La Luz homenajean,
como cada 25 de julio desde 1980, a Belén María, la hija de un
trabajador de la estiba que falleció durante unas protestas en la
capital grancanaria. Esta fecha ha sido escogida como el día solidario
para todos los trabajadores del sector en España.
A sus 74 años, Manolo Hernández sigue asistiendo a los actos de
homenaje a la pequeña Belén María, la hija de un estibador que tal día
como ayer, hace 35 años, falleció durante una manifestación de los
trabajadores de la estiba. Vestido de negro, Hernández, que por entonces
era el coordinador estatal de los trabajadores, estuvo presente en la
misa que recordó a una niña "inquieta" a la que "nunca olvidaremos".
"Tenía infinidad de poemas que recogían su compromiso social", apuntaba
Miguel Hernández, portavoz de los portuarios en el Puerto de La Luz, que
agregaba que con el paso de los años su imagen se ha convertido en una
"referente" para los portuarios.El párroco Armando se encargó durante la mañana de ayer de dar comienzo a una jornada de vivencia entre todos los estibadores. En su homilía, el cura llamó a los trabajadores a recuperar el sentimiento de unión que provocó el fallecimiento de Belén María. "Es importante que estén unidos", decía, para afrontar un futuro que, añadía, gracias al acuerdo con la naviera MSC se prevé que el recinto portuario recupere "la importancia que tuvo en sus años".
En el sermón, al que asistieron, entre otros, el presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, y la concejala del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria Inmaculada Medina, los miembros de la rondalla portuaria cantaron la canción Belén María en uno de los momentos más emotivos del día. Posteriormente, los más de un centenar de asistentes, entre los que se encontraban estibadores de otros puertos españoles, acudieron hasta la plaza que lleva el nombre de la niña, en la entrada al Puerto, para realizar la tradicional ofrenda floral y la suelta de palomas. Por la tarde, se celebró lo VI Regata Belén María, en la que participaron diez botes y que acabó con la victoria del Puerto de La Luz. Además, se ofreció una gran paella.
En la emotiva jornada también se dio a conocer la decisión por parte de la Coordinadora Solidaria de decretar el 25 de julio como el día solidario para los trabajadores de la estiba y la desestiba de toda España. Esta decisión ha supuesto para los portuarios "una gran satisfacción", indicaba Miguel Hernández. Y es que la historia de Belén María no sólo es visible en el recinto portuario de la capital grancanaria, como explicaba Hernández. "Todas las coordinadoras de los puertos de España tienen una foto de ella", señalaba.