martes, 18 de agosto de 2015

LAS MADRES CANARIAS SIN PAREJA SE ENFRENTAN A LA MISERIA

La pobreza en el Estado español también es cuestión de género.  La gran cantidad de estudios que advierten sobre la influencia de este factor, asociado al más determinante de la clase social, han sido confirmados una vez más. El último de estos estudios, denominado Más solas que nunca, era presentado la pasada semana por la ONG Save the Children, y ha sido elaborado con datos de la Encuesta Continua de Hogares 2014 del Instituto Nacional de Estadística (INE) y de la Fundación para el Fomento de Estudios Sociales y Sociología Aplicada (Foessa).
 Dicho documento, que aborda la realidad del cerca de millón y medio de hogares formados por madres solas con sus hijos que hay en  el Estado español, revela que más de la mitad de estas mujeres están en situación de pobreza o exclusión social, al verse obligadas a  a mantenerse junto a uno o varios hijos con menos de 600  euros al mes.
 La extrapolación de los datos a Canarias indica que actualmente se encuentran en esta situación más de 35.000 de los cerca de 79.000 hogares formados por una mujer y al menos un hijo menor de 25 años.
 El perfil más habitual de estas madres es el de una mujer de entre 25 y 45 años en situación de desempleo o con un contrato precario; con problemas de vivienda por impagos o riesgo de desahucio; y, que en algunos casos, se han visto obligadas a dejar de pagar  recibos de agua o luz, dejar de comprar medicinas o de seguir un tratamiento por falta de medios económicos. Más de un 30% de ellas se encuentran situación de exclusión sanitaria.
 El informe de Save the Children indica, asimismo, que el mayor aumento de las situaciones de pobreza y exclusión  se produjeron el pasado 2014 en el seno de estas familias monoparentales. Respecto a las cifras de 2013, ello implica una subida del 6% en el riesgo de exclusión, hasta alcanzar al 53,3% de los hogares, y un incremento del 4% en el nivel de pobreza relativa, que ya afecta al 42%.
 En los hogares con dos adultos, en cambio, la pobreza relativa se situó en 2014 en el 25,8%, un 16% menos.

 SIN DINERO PARA ALIMENTAR CONVENIENTEMENTE A SUS HIJOS

 Según alerta Save the Children, los menores son los más afectados por esta situación. De acuerdo a las estadísticas con las que cuenta la ONG, el 21% de estos niños con madres solas no puede permitirse tener unas gafas, mientras que el 30% no puede seguir un tratamiento especializado.
 El 68% de estas familias ha necesitado reducir gastos relacionados con la alimentación y más de una de cada cuatro, 27,2%,  no siguen una dieta equilibrada que incluya la cantidad de proteínas recomendada, cifra que es del 20% en hogares biparentales.
 “Estas circunstancias pueden ocasionar en los niños desde problemas de malnutrición a problemas psicológicos que, entre otras consecuencias, pueden incidir en su rendimiento escolar” -advierten desde la Organización no Gubernamental, que asegura que “no son pocos los menores que tienen problemas psicológicos relacionados con las situaciones vitales estresantes que se viven en sus hogares, ni tampoco es extraño que, a consecuencia de estos problemas, tengan dificultades académicas”
 Casi la mitad de estos menores se encuentran en situación de exclusión social, frente al 25,1% de la población en general.
 La investigación llevada a cabo por Save The Children, concluye que en muchos casos estas madres no cuentan con ninguna red de apoyo, lo que también repercute en su salud y hace que más de la mitad sufra depresiones.