ELENA HERNÁNDEZ
SANTA CRUZ DE TENERIFE
La historia se repite cada vez más dentro de las empresas canarias. El
compañero competitivo o el jefe autoritario sobrecarga de trabajo,
infravalora, ridiculiza o amenaza a un empleado. El trabajador acosado
calla, pero su autoestima se va minando día tras día y al final cae en
la desesperación. Se siente incomprendido, aislado e ignorado. Desde el
comienzo de la crisis, el empeoramiento de las condiciones de trabajo y
el "agarrarse a lo único que hay" ha duplicado los casos de mobbing en
el Archipiélago. Sin embargo, el temor a peder el empleo ha moderado el
incremento y ha provocado que en los últimos dos años fueran muchos los
que optaron por aguantar lo intolerable sin acudir al juzgado.
En lo
que va de año se han registrado 140 denuncias por acoso laboral en la
provincia de Santa Cruz de Tenerife, 54 casos más que en 2007, cuando a
la crisis económica aún ni se la esperaba. Además, según la Encuesta de
Condiciones de Trabajo de 2011, un 13,11% de los canarios ha sentido
violencia verbal y física, discriminación o aislamiento dentro de su
empresa y una de cada cinco consultas que llegan a los sindicatos
canarios tienen que ver con los riesgos psicosociales.
La reducción
de plantillas, la inseguridad ante el futuro y el aumento de la carga de
trabajo están multiplicando la aparición de patologías asociadas al
estrés. Estos trastornos –sumados a las estrategias empresariales para
desgastar a los trabajadores y lograr que se marchen sin recibir
indemnización o a las maniobras de los compañeros que temen la
competencia– provocan que el riesgo de ser víctima del mobbing, en la
actualidad, sea el doble que hace seis años.
Sin embargo, los
expertos matizan que el temor a perder el empleo está reduciendo el
número de denuncias que llegan a los juzgados. Durante el 2011 se
realizaron 70 actuaciones más sobre acoso laboral que en el mismo
período de 2012. Con una tasa de población activa del 63,3% en este
último semestre, los canarios se atreven, cada vez menos, a denunciar y
poder perder así su empleo.