Aunque no es la primera vez que ocurre es llamativo que caiga en esto que no parece especialmente ético precisamente el área de participación ciudadana. Detrás de tanto autobombo progresista parece que el concejal Millares no cree mucho en la importancia de usar medios éticos para alcanzar el loable fin de dar a conocer las políticas (acertadas o no) de participación.
Ahí está la misma noticia, el mismo día, en Canarias7 y en LaProvincia, con la pequeña indicación arriba a la derecha de ser "especial" en vez de llevar el nombre de la sección. ¿Esto no es corrupción? ¿Esto es la llegada al Ayuntamiento de políticas diferentes?