M. Gómez, S/C de Tenerife
La población del Archipiélago que se encuentra por debajo del umbral
de la pobreza descendió ligeramente el año pasado hasta situarse en el
33,2%. Pese a la reducción experimentada por esta tasa -que en 2011 era
del 35%-, sigue siendo la segunda más elevada del país tras la de
Extremadura.
Así se desprende de la Encuesta de Condiciones de Vida de 2012, hecha
pública ayer por el Instituto de Estadística de Canarias (INE), que
aporta otro indicador: la tasa de riesgo de pobreza o exclusión social,
que al primer concepto suma los criterios por los que se que mide la
exclusión (hogares en carencia material severa o sin empleo).
En este caso, el índice asciende hasta el 39,7%, el más alto de toda
España y solo dos décimas inferior al que registraba un año antes. Este
indicador es empleado por la UE para calibrar el cumplimiento de los
objetivos de la estrategia Europa 2020.
Canarias supera ampliamente la media nacional en ambos registros. Su
tasa de riesgo de pobreza es once puntos más elevada -la del conjunto
del país es del 22,2%, la misma que en 2011-, mientras que el indicador
conjunto de riesgo de pobreza o exclusión social se sitúa 11,5 puntos
por encima de la media española -un 28,2%, frente al 27,7% del año
anterior-.
Cada canario percibe unos ingresos anuales netos de 7.313 euros, solo
superiores a los de los murcianos y los extremeños y a quienes residen
en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Los ciudadanos navarros y
los vascos encabezan este registro, con unos ingresos al año de 12.079 y
11.901 euros, respectivamente.
A la hora de definir las dificultades económicas por las que pasan
los hogares españoles, el INE mide diferentes aspectos. Así, el
Archipiélago presenta la mayor proporción de familias incapaces de
afrontar gastos imprevistos. Un 64,1% del total no puede hacerlo, un
dato muy superior a la media nacional, del 41%, según datos
provisionales de 2013 incluidos también en la encuesta.
El porcentaje de hogares que se retrasan en los pagos del alquiler o
la hipoteca de su vivienda principal -otro de los criterios estudiados
por el INE- es en Canarias del 15,1%, el segundo más elevado del país
tras los que se dan en Murcia (19,7%) y Baleares (17,2%). La media del
país, en este caso, es del 9,2%.